La lección 114 de Un Curso de Milagros nos ofrece dos repasos para la mañana y la noche. El primero consiste en repetir tres veces la afirmación: «Soy Espíritu. Soy el Hijo de Dios. No hay cuerpo que pueda contener mi Espíritu o imponerme una limitación que Dios no haya creado».
El segundo repaso consiste en aceptar nuestro papel en el plan de Dios para la salvación y reconocer que nuestra función es aceptar la Palabra de Dios. La afirmación que debemos repetir es: «Aceptaré el papel que me corresponde en el plan de Dios para la salvación».
Además, se nos sugiere que a la hora en punto repitamos la primera afirmación: «Soy Espíritu», y media hora más tarde repitamos la segunda afirmación: «Aceptaré el papel que me corresponde en el plan de Dios para la salvación». De esta manera, nos enfocamos en recordar nuestra verdadera identidad como espíritus y en nuestra función en el plan de Dios.
MoZ #PrimeroTuPaz
Primero tu paz y después lo demás 
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